"En el contexto político, TikTok se ha transformado en un arma de influencia ideológica sin precedentes. Los gobiernos han comenzado a entender que controlar o regular plataformas como TikTok no solo es una cuestión de ciberseguridad, sino también de hegemonía cultural e ideológica."
Cronología completa de las tensiones entre TikTok y el gobierno de EE. UU., desde la ley firmada por Biden hasta la intervención de Trump.
Un año de tensiones políticas y legales
El conflicto comenzó el 24 de abril de 2024, cuando el presidente Joe Biden firmó una ley que obligaba a ByteDance, propietario chino de TikTok, a vender la aplicación o enfrentar una prohibición total en Estados Unidos. El Senado aprobó la medida por una amplia mayoría (80-19), argumentando que buscaba proteger la privacidad de los datos de los ciudadanos y la seguridad nacional. En respuesta, TikTok presentó una demanda el 7 de mayo de 2024, calificando la ley como una violación de la Primera Enmienda y argumentando que había invertido miles de millones para proteger los datos de los usuarios estadounidenses.
El conflicto escaló rápidamente. Ocho usuarios de TikTok demandaron al gobierno federal el 14 de mayo de 2024, calificando la prohibición como “inconstitucionalmente amplia”. Sin embargo, los tribunales fallaron en contra de TikTok en múltiples ocasiones. El Tribunal de Apelaciones del Circuito de DC rechazó una petición de revisión de la ley el 6 de diciembre de 2024, alegando que las preocupaciones de seguridad nacional tenían más peso que los derechos constitucionales de la empresa.
La llegada de Trump y el cambio de dirección
Con la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de 2024, el enfoque sobre TikTok tomó un rumbo inesperado. El 16 de diciembre de 2024, el CEO de TikTok, Shou Zi Chew, se reunió con Trump en Mar-a-Lago, buscando evitar la inminente prohibición programada para el 19 de enero de 2025. Sin embargo, la Corte Suprema rechazó el 18 de diciembre de 2024 la solicitud de TikTok de bloquear temporalmente la ley, dejando el destino de la aplicación en manos de la administración entrante.
El 19 de enero, a medianoche, TikTok quedó oficialmente prohibido en Estados Unidos. Durante más de 12 horas, los usuarios estadounidenses no pudieron acceder a la plataforma, mientras los proveedores de servicios de Internet y las tiendas de aplicaciones cumplían con la ley.
La resurrección de TikTok y la orden ejecutiva de Trump
Ese mismo día, Trump anunció que firmaría una orden ejecutiva para retrasar la prohibición por 75 días, con el objetivo de encontrar una solución. Durante un mitin de celebración inaugural, afirmó: “TikTok está de vuelta” y sugirió la creación de una empresa conjunta en la que Estados Unidos poseería el 50% de la compañía. Esta medida fue criticada por el senador Kevin Cramer, quien cuestionó su legalidad y la posible interferencia en la separación de poderes.
El 20 de enero, figuras destacadas como Tim Cook, Joe Rogan y el CEO de TikTok asistieron a la toma de posesión de Trump. Más tarde, el empresario Jimmy Donaldson, conocido como Mr. Beast, anunció su intención de liderar un grupo de inversores para comprar TikTok, acompañado del empresario tecnológico Jesse Tinsley. Ese mismo día, el senador Tom Cotton advirtió que cualquier empresa que facilite a TikTok podría enfrentar sanciones severas.
Un conflicto que involucra a China y nuevos actores
Mientras tanto, en China, los funcionarios del gobierno consideraron vender las operaciones estadounidenses de TikTok al multimillonario Elon Musk, un aliado cercano de Trump, según Bloomberg. Sin embargo, ByteDance sigue prefiriendo mantener el control de la plataforma. El 14 de enero, analistas estimaron que las operaciones de TikTok en Estados Unidos podrían valer hasta 50.000 millones de dólares si incluyen su algoritmo.
En paralelo, episodios de violencia relacionados con el conflicto también acapararon titulares. El 19 de enero, un joven de 19 años fue arrestado por incendiar la oficina del representante Glenn Grothman, alegando que su motivación fue la prohibición de TikTok.
¿Cuál es el futuro de TikTok?
Con la orden ejecutiva de Trump, TikTok tiene un respiro de 75 días para negociar su futuro en Estados Unidos. Durante este tiempo, ByteDance deberá decidir si acepta una venta parcial, se convierte en una empresa conjunta con propietarios estadounidenses o enfrenta nuevamente el espectro de la prohibición. La situación se complica con la presión de los legisladores, las demandas judiciales y los intereses empresariales de figuras como Mr. Beast y Elon Musk.
Por ahora, la incertidumbre domina el panorama, y las decisiones que se tomen en las próximas semanas podrían definir no solo el futuro de TikTok, sino también el curso de las relaciones entre Estados Unidos y China en el ámbito tecnológico.